viernes, 19 de septiembre de 2008

Diseñadores gráficos y la piratería

El photobook que se hace utilizando impresiones 30x60 o 31x61, diseñado para bodas e impreso en papel fotográfico de proceso químico (ya que hasta ahora permite una calidad insuperable), es un producto premium que permite satisfacer la demanda de novias exigentes en calidad y creatividad en todos sus componentes (diagramación, colores, empastado, tamaño, etc.). Es además una presentación que permite al fotógrafo demostrar que es un artista, un profesional de la fotografía, un fotógrafo diferente capaz de dar la exclusividad, la primicia.

Cuando el fotógrafo no se distingue (todos utilizan las mismas plantillas, la ubicación de las fotos son casi las mismas porque utilizan al mismo diagramador o diseñador gráfico o alguien que oficia de tal), deja de ser un artista y se convierte en elemento sin sello particular, carente de creatividad y personalidad.

¿A qué viene este comentario? Un fotógrafo de bodas que presume de "muy fotógrafo", " muy profesional", me pide una opinión sobre su trabajo: reviso las impresiones y rápidamente me doy cuanta que son plantillas pirateadas, ideas de otros fotógrafos. Esto lo confirmo cuando le pido una explicación de cada una de ellas y no sabe explicarme el concepto, la idea de la ubicación de las imágenes. Cuando le pregunto sobre los diseños, me dice casi orgulloso "yo pago 200 soles por el diseño. Antes le pregunto por qué no acepta mis servicios de 30 soles la hora y responde: " me sale muy caro".

Para él "caro" es lograr la diferenciación, la novedad, no se da cuenta que le cobran "barato" porque esa persona lo hace rápido debido a que las plantillas no son otra cosas que diseños pirateados de otros fotógrafos. Este diseñador grafico "profesional" va a piratear alguna idea que él pueda darle y luego se la mostrará a otro.

Lo que pasa con muchos fotógrafos de bodas es que se engañan. Nunca sospechan cuando les ofrecen servicios "baratos", " rápidos", no entienden que lo barato a la postre sale caro ya que está pagando 200 soles para ser uno del montón, haciendo lo mismo que todos los fotógrafos apurados que buscan precio bajo y no se dan tiempo para sospechar que ese precio "barato" esconde la trampa del pirata.

La diagramación de un book no es otra que la redacción de una historia con imágenes. De allí que el orden y la ubicación de las fotografías es una tarea de orfebre, de un artesano que va poniendo, quitando, probando, midiendo, balanceando imágenes, y eso se hace con tiempo: un cuento o una novela no se escribe en media hora.

Dude, desconfíe y acertará. Pregúntese por qué tan barato. A lo mejor usted está pagando para que se queden con sus ideas. Es un error grave aquello de llevar sus imágenes a una persona que cobra barato por hacer las plantillas de su book.

Lo mismo pasa con el laboratorio que hace la impresión, donde con seguridad no se han tomado las medidas de garantía para que las plantillas no se muestren o copien a otros fotógrafos. Espero que estas ideas puedan ser útiles.

fernando.cespedespais@gmail.com